Amsterdam y Santiago; características de la ciudad moderna
Ámsterdam y Santiago; en primera instancia parece que son ciudades totalmente diferentes. Ámsterdam tiene menos que un millón de habitantes mientras que Santiago ya tiene más de seis millones. El hecho de que el centro antiguo de Ámsterdam esté lleno de monumentos hace que no haya calles grandes como las anchas avenidas que se encuentra en Santiago. Además, Ámsterdam queda en un país bajo del nivel del mar, razón por la cual casi siempre hay viento. En tanto que Santiago está rodeado de montañas y sin ventilación.
Por otro lado, ambas son ciudades contaminadas por la industrialización. Ámsterdam sólo tiene 850.000 habitantes pero se encuentra en una zona industrializada de diez millones de habitantes. El hecho de que Santiago no tenga buena ventilación hace que la contaminación se quede en la ciudad. Así que las condiciones del aire en las dos ciudades podrían ser mejores.
Ámsterdam tiene un centro mucho más antiguo que Santiago, pero en las dos ciudades hay barrios bonitos donde los yuppies, artistas y hippies quieren vivir. No es que sea imposible vivir en los centros de Ámsterdam ó Santiago, pero el que estos yuppies se empeñen en vivir en el centro hace que sea muy caro vivir en los mejores barrios. Es cierto que en las dos ciudades los pobres viven en los peores barrios lejos del centro.
Ámsterdam debe ser la capital de las drogas; el Sodoma y Gomorra del oeste, y da la impresión de que el uso de marihuana es más alto que en Santiago, es sólo por los turistas Italianos y Españoles que vienen a Ámsterdam solo a fumar. Pero Santiago igual tiene sus fumadores de porro, pareciera que cada joven tiene una planta de marihuana en su casa.
El trafico en Santiago es bastante caótico. Hay tacos en todos lados aunque las calles son bastante anchas. En Ámsterdam también es un desastre andar en coche por el centro. Hay muchas calles estrechas con tacos por todos lados. Por eso hay un buen transporte publico en las dos ciudades, que a mi me parece , necesario para la congestión. Las dos ciudades tienen un sistema bastante moderno. Hay metros y autobuses que te llevan a cualquier parte de la ciudad.
No dudo que las dos ciudades tengan activos y pasivos. Las dos ciudades son ciudades limpias, relativamente seguras con lugares muy lindos. Las dos tienen los problemas de las metrópolis, como congestión, segregación y pobreza. Por otro lado, en las dos ciudades la gente sabe como disfrutar y para mi, a mi me encanta vivir en estas dos ciudades con todas sus problemas.
La vida, un suplicio
Otro día. De nuevo intentar a ser normal. Que mierda es. Tengo que seguir viviendo, sin sueños, sin follar y sin polola. Por bonito que sea este día, yo no quiero salir, ni hoy, ni mañana, ni en la semana que viene. Que pena que me llamaron ayer. Fue tan raro, hablar con el centro. Cuando contesté, ya supe quien era. Me dijeron que hoy debía hacerlo. No podrían esperarme. Pues, aquí estoy, preparándome para salir. Creo que la última vez que salí de casa, fue el jueves pasado para comprarme un cerdo entero. Ahora, todo que me queda de mi cerdo, son unas patas y la cabeza. Mañana voy a hacer una sopa de la cabeza. Pero ahora debo ponerme en camino.
Cierro la puerta, camino todo recto hasta que veo la botillería de Cristóbal que vende trece tipos de cerveza. Claro que yo las he probado todas. Sigo caminando hasta que llego al Paseo Ahumada. Está atestado. Esta manada de lobos se mueve a mi alrededor, como un enjambre mediocre y triste. Todos caminan rápido. Mira la cara de este idiota. ¿Porque me estás mirando así? Ya sé que piensas que soy virgen. Aaah, estos tipos me apestan tanto. Oigo un grito. Ha comenzado. El ladron se lanza a correr con nuestro botín. En el mismo tiempo el idiota extiende la pierna derecha. ¿Que no, qué haces? El ladron se cae pero felizmente se levanta como si fuera de goma. Faltó poco. Ahora le sigo en la multitud. Corre bastante rápido, pero yo sé a donde se va. Al fin del Paseo Ahumada voy a la derecha, sigo caminando hasta que la calle se cambia en un callejón. Me duele mi cabeza. Ser normal, no eres normal, cuantas veces ya me habías dicho que no soy normal. ¿Dónde estás, estás? La empresa me explicó que cosa podría pasarme si no llegaría en tiempo.
Mira que lindo es, el botín. Es mi precio. Me acuerdo que la mujer gritó como un cerdo, cuando le cortaron su cuello. Como mi cerdo. Sin cabeza. Sin ser normal. El botín no es mi botín y yo debo irme. Camino hasta la entrada. Abro las puertas pesadas. Allí están. Me están esperando. Tomo mis medicinas y me doy cuenta que el idiota tenia razón; soy virgen y me quedaré virgen. Tengo que seguir viviendo, sin sueños y sin escaparme otra vez de este hospital mental. Que suplicio!!!
Autorretrato
Un autorretrato. ¿Cómo comenzar a escribir un autorretrato? ¿Describir los sucesos más importantes de tu vida? ¿Describir tus características o pedir a alguien como eres como persona? ¿O empezar a desenterrar recuerdos? No me recuerdo nada de ser bebé. ¿Cómo podría recordarlo? A veces miro a las fotos e intento a darme cuenta de las imágenes para que puedan existir en mi memoria como recuerdos. Recuerdos son mentirosos. Se transformen en lo que tú quieres que sean. Me recuerdo que no me gustaba nada de comida hasta que tenía trece años. Quizás sufro de pérdida de memoria o quizás prefiero olvidar que siempre lloraba, que no comía nada y que vivía en una ciudad dormitorio.
¿Los sucesos más importantes de mi vida? ¿Que mis padres se separaran cuando tenía quince años? No, fue importante, pero sería demasiado cliché decir que cambió mi vida. Además, en mi país los demás de los padres son solteros. Y los demás de sus hijos se sienten diferentes o alternativos, igual como yo. Viven solo como yo e igual como yo, dijeron una vez que nunca querían casarse, que todo sería diferente. Así es, la vida. Criarte hasta que eres adulto, hasta el momento que no te quedan más sueños. Solo recuerdos.
Si, mis amigos tienen razón cuando me dicen que soy un pesado. Por otro lado, soy muy alegre y disfruto caminar por las calles con un sonrió tan grande que debe parecer que estoy peinando la muñeca. Y que suerte que tengo criarme en un país protestante. Así que tengo la sobriedad que es característico para un holandés. Siempre relativizando todo. Por lo tanto, estudio historia, y por lo tanto, tengo buenas notas. Porque es uno de las muy pocas cosas que te enseñan en la facultad de historia. Ser objetivo y ser un pesado. Pero qué bueno es, ser un pesado. A mí, me encanta ser un pesado. Mear sobre mala música. Mear que hay tanta gente con un mal gusto. Y además tener la arrogancia de pretender que yo si, tengo un buen gusto. Qué maravilloso es.
Qué bueno es, ser malo, decir lo que nadie quiere decir. Ser incorrecto. A veces, me gusta tanto ser malo, que me cuesta mucho portarme como que soy. ¿Y cómo soy? Soy tranquilo, soy nervioso, soy soltero, me gusta ser soltero pero me encanta enamorarme. Soy egoísta, soy oportunista, soy narcisista, soy un buen cocinero, me encanta cocinar y además no me molesta fregar los platos después de cocinar. Soy cobarde por pecado, soy héroe hasta que me despierto, soy héroe con las chicas y soy un cobarde con las chicas. Los quiero a mis padres y los odio a veces. Necesito mis amigos y a veces, parece que ellos me necesitan también. Entonces, parece que no soy tan mala persona. Igual que todos, tengo mis ventajas y desventajas.
¿Los sucesos más importantes de mi vida? ¿Que mis padres se separaran cuando tenía quince años? No, fue importante, pero sería demasiado cliché decir que cambió mi vida. Además, en mi país los demás de los padres son solteros. Y los demás de sus hijos se sienten diferentes o alternativos, igual como yo. Viven solo como yo e igual como yo, dijeron una vez que nunca querían casarse, que todo sería diferente. Así es, la vida. Criarte hasta que eres adulto, hasta el momento que no te quedan más sueños. Solo recuerdos.
Si, mis amigos tienen razón cuando me dicen que soy un pesado. Por otro lado, soy muy alegre y disfruto caminar por las calles con un sonrió tan grande que debe parecer que estoy peinando la muñeca. Y que suerte que tengo criarme en un país protestante. Así que tengo la sobriedad que es característico para un holandés. Siempre relativizando todo. Por lo tanto, estudio historia, y por lo tanto, tengo buenas notas. Porque es uno de las muy pocas cosas que te enseñan en la facultad de historia. Ser objetivo y ser un pesado. Pero qué bueno es, ser un pesado. A mí, me encanta ser un pesado. Mear sobre mala música. Mear que hay tanta gente con un mal gusto. Y además tener la arrogancia de pretender que yo si, tengo un buen gusto. Qué maravilloso es.
Qué bueno es, ser malo, decir lo que nadie quiere decir. Ser incorrecto. A veces, me gusta tanto ser malo, que me cuesta mucho portarme como que soy. ¿Y cómo soy? Soy tranquilo, soy nervioso, soy soltero, me gusta ser soltero pero me encanta enamorarme. Soy egoísta, soy oportunista, soy narcisista, soy un buen cocinero, me encanta cocinar y además no me molesta fregar los platos después de cocinar. Soy cobarde por pecado, soy héroe hasta que me despierto, soy héroe con las chicas y soy un cobarde con las chicas. Los quiero a mis padres y los odio a veces. Necesito mis amigos y a veces, parece que ellos me necesitan también. Entonces, parece que no soy tan mala persona. Igual que todos, tengo mis ventajas y desventajas.
2 comments:
tu español está mejorando
el primer texto lo lei de tu hoja cuando lo habias escrito hace muy poco para tu trabajo del curso de español.
es muy bueno, pero me gusta más el segundo donde reconoces al kris que creo que en algunas cosas tambien reconozco... algunas no.- jeje--
oye y si ayer vi que tu español esta mejorando y mucho...
nos vemos.
bye
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